- Religiosos dijeron que perdonan a quienes asesinaron al sacerdote tsotsil, pero que estas personas “rectifiquen su vida”; pidieron al gobierno que vea la forma inteligente de desarmar a criminales ya que “la gente no va a hacer denuncias porque se juegan la vida.
Texto: Ángeles Mariscal/ Chiapas Paralelo
San Andrés Larráinzar, Chis.- El cuerpo del padre Marcelo Pérez Pérez asesinado el pasado 20 de octubre, continuó recibiendo las honras fúnebres en el municipio de San Andrés Larráinzar, de donde era originario y donde viven sus padres.
Hasta ahí llegaron pobladores de diversas comunidades y municipios, para despedirse de quien los acompañó en sus luchas por la tierra, por el territorio, por la búsqueda de justicia y por otras causas a lo largo de sus 22 años de sacerdocio.
En San Andrés Larrainzar, afuera de la parroquia de San Andrés Apóstol, se llevó a cabo una misa de cuerpo presente, oficiada por los obispos Felipe Arizmendi, Rodrigo Aguilar y otros sacerdotes y diáconos, hombres y mujeres indígenas.
En la misa el arzobispo Rodrigo Aguilar dijo: “perdonamos de corazón a los que ejecutaron esta acción material e intelectual, pero les invitamos a recapacitar prepárense, no a una vida, eterna de condenación rectifiquen tienen todavía tiempo ustedes actores de la maldad que están escuchando rectifiquen su vida transformen su corazón conforme a las bienaventuranzas de Cristo Jesús”.
También, en entrevista, Felipe Arizmendi, quien fue el que ordenó como sacerdote a Marcelo Pérez hace 22 años, habló sobre la violencia. “En Chiapas siempre tuvimos problemas, como en todo México, pero en aquel tiempo era otra cosa, ahora son otras situaciones que han cambiado. Eso significa que en el país está en descomposición, lamentablemente. Nuestro llamado a las autoridades es que vean la forma inteligente de desarmar a esos grupos armados aquí y allá, que no estén esperando que la gente haga denuncias. La gente no va a hacer denuncias porque se juegan la vida”.
También hablaron sobre la vida del sacerdote sus compañeros de la fe de la parroquia del lugar, dijeron: “Este hecho -su asesinato- no es un caso aislado, al padre Marcelo lo mataron por su compromiso con el pueblo de Dios más desfavorecido, y por su labor de defensa de los derechos humanos ante la violencia generalizada que padecemos en Chiapas y México”.
“Al padre Marcelo lo mataron por ser un mediador, promotor y constructor de paz en Chiapas. Al padre Marcelo lo mataron por haber denunciado las injusticias en nuestros pueblos, por haber alzado la voz contra la violencia perpetrada por el crimen organizado y por el Estado mexicano.
“Al padre Marcelo lo mataron por acompañar las luchas y resistencias de nuestros pueblos, por denunciar la criminalización a la que hemos sido objeto los pueblos indígenas, los despojos de nuestros territorios, los desplazamientos forzados, los encarcelamientos injustos y los asesinatos.
“Al padre Marcelo lo mataron por ser un profeta quien optó siempre por los pobres. El Estado mexicano también es responsable de este crimen por su omisión ante la creciente violencia y por no atender de manera eficiente las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.
Palabras de la Diócesis de San Cristóbal
Pronunciamiento de Las Abejas de Acteal
Palabras de un sobreviviente de Acteal
Palabras de mujeres tsotsiles
Palabras de un poblador de San Andrés
Palabras de un feligrés
Palabras del gobierno comunitario de Chilón
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Este trabajo fue publicado originalmente en Chiapas Paralelo que forma parte de la Alianza de Medios de la Red de Periodistas de a Pie. Aquí puedes consultar su publicación.