A la 1:35 A.M del 1 de enero de 2016 Alejandro Murat Hinojosa se convirtió en el nuevo gobernador de Oaxaca para el periodo 2016-2022. Y lo hizo dándole “madruguete” a la sección 22 de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) que habían sitiado la ciudad de Oaxaca y la sede de los poderes legislativo, parte de ciudad judicial y el palacio de gobierno con la finalidad de impedir dicha toma de protesta programa originalmente para las 10 de la mañana del mismo día.
Después de varios cambios de sedes durante la madrugada y con 35 diputados presentes ( faltaron 7 de morena , solo asistió su líder Irineo Molina) invitados priistas, gobernadores y su “gabinete” y varios medios nacionales, presenciaron el acto que fue difundido por las redes sociales. Para algunos fue criticable el “método” de ascender por la puerta de atrás ante las manifestaciones, para otros fue una estrategia para desactivar a la Sección 22 e impedir escalara la violencia durante el día. Ya por la mañana Murat declaró en medios nacionales que “es necesario ocuparse de lo importante y que aunque existían condiciones la idea era mantener la paz social en el estado no cayendo en provocaciones”. Y al despertar los oaxaqueños encontraron al hijo del dinosaurio sentado en palacio de gobierno.
